La casa de las manchas de sangre

HET HUIS MET DE BLOEDVLEKKEN

La casa está ubicada en la calle Amstel 216.

A finales del siglo XVII, Coenraad van Beuningen, Alcalde de Amsterdam y Director de la Compañía Holandesa de las Indias Occidentales, vivió en ella.

Nació en Amsterdam en 1622, de padres protestantes, y fue el diplomático más experimentado de la República Holandesa.

Van Beuningen fue aprendiz como secretario diplomático de Hugo de Groot en su exilio en París. Más tarde fue nombrado Embajador y realizó misiones diplomáticas a la región del Mar Báltico, Francia e Inglaterra. Luis XIV le ofreció un puesto en su Corte, pero Van Beuningen, contrario a la política del Rey Sol, lo rechazó porque, en ralidad, quería viajar a Constantinopla. Cuando regresó a Amsterdam, en 1669, fue nombrado Alcalde.

En 1686, Van Beuningen alquiló la casa situada en Amstel 216, construida por Adriaan Dortsman, como ciudadano no oficial, ya que renunció a su puesto de Alcalde por los continuos ataques contra él, criticándole por sus inversiones en la Compañía de las Indias Occidentales (VOC), en las cuales perdió medio millón de florines en 1688, y por financiar la invasión armada de Guillermo III en Inglaterra, la cual provocó una crisis financiera en la república Holandesa. Incluso sufrió un atentado contra su vida y quemó varios de sus muebles.

Después de mantener una larga relación con su ama de llaves, Madame d’Allone y un amorío con una tal señorita Ferentz, Van Beuningen se casó, el 12 de junio de 1686 en Sloterdijk, con Jacoba Victoria Bartolotti, de 46 años, hija de Guillelmo Bartolotti van den Heuvel, comerciante y banquero, y Jacoba van Erp, ambos ciudadanos de Amsterdam y dueños de una gran fortuna y una de las casas más fastuosas de la época, que aún persiste.

Jacoba tenía muy mala reputación y quería lavar su imagen. Se decía que volvía locos a muchos hombres. Christiaan Huygens, su primo, le escribió a su hermano Constantijn el 12 de diciembre de 1669: «elle semble née pour les avantures» (Huygens, Oeuvres complètes 6, 543).

Después de dos años (julio de 1689), la pareja vive por separado. Esto se debía a la enfermedad mental de Van Beuningen, que desataba sus ataques de ira contra su esposa. Él la llamó «puta», la echó de la casa y mandó a llamar a su ex ama de llaves, la señora d’Allone.

Los problemas matrimoniales, su no diagnosticada bipolaridad y la desafortunada especulación en el mercado de valores lo condujeron gradualmente a la locura. Van Beuningen tenía un amplio interés en asuntos ocultos, como el chiliasmo o la expectativa del tiempo del fin, la astrología, la interpretación de los sueños y los milagros. Escribió un argumento confuso sobre el Reino del Milenio que estaría cerca. Comenzó a deambular por las calles como un profeta de la fatalidad, y a través de «cartas de cartas» intentó convertir a los judíos al cristianismo.

Jacoba Bartolotti tuvo que encerrar a su esposo en su propia casa en 1688, custodiado por siete sirvientes dirigidos por un hombre con el poder de «Sansón».

Se cuenta que pasó sus últimos años maniatado por su propia seguridad, torturado por su servidumbre y maltratado por su esposa. Cuando lograba liberarse, salía de su casa en camisón, gritando sin parar. Uno de esos días Van Beuningen pintó la fachada de la casa con su propia sangre, inscribiendo palabras y dibujos. En 1937 los muros de piedra natural fueron arenados, pero los signos conservaron su visibilidad.

Antes de su muerte, Van Beuningen se había mudado a una casa más pequeña, también en el Amstel.

Coenraad van Beuningen murió el 26 de octubre de 1693 y fue enterrado en la Oude Kerk en Amsterdam.

Nunca se ha realizado una investigación grafológica comparativa para identificar si los símbolos de la pared del frente de la casa de Amstel 216 pertenecen realmente a Coenrad Van Beuningen. Según algunos historiadores, las inscripciones contienen suficientes pistas para vincularlo. Además del nombre de Van Beuningen a la izquierda de la entrada también se distingue del nombre de su esposa Jacoba, mientras que el barco firmado puede referirse a sus inversiones en las acciones de VOC y los signos hebreos pueden referirse a la llegada del Reino Milenial.

En 1953 Hugh Jans, el ilustrador permanente de Het Vrije Volk, hizo una reconstrucción del graffiti para preservarlo. Para evitar un mayor desgaste y daños al original, los protectores del patrimonio querían colocar una placa de vidrio especial contra la fachada, pero nunca llegó. Los escépticos piensan que no hay manchas de sangre, sino tiza roja. Los románticos saben embellecer la leyenda aún más. Por ejemplo, el autoproclamado cazador de fantasmas Richard Meijer le dijo a Het Parool en 2004 sobre una «risa burlona» que asustaría a los residentes locales y a los caminantes nocturnos. Meijer también señaló el notable número elevado de accidentes de tránsito frente al edificio con manchas de sangre. Puede ser esto una coincidencia?

Fuentes: Basado y elaborado de apuntes y textos de Maarten Hell (Historiador) y Wikipedia

Fotografías: Carmen Toledo

• 

• 

• 

• 

• 

• 

• 

• 

•